Cuando nos sentamos a la mesa, a consumir algún alimento, bendecimos a El Eterno por ese alimento que nos está dando, y le pedimos que así como nos da a nosotros en abundancia, también le de alimento a los necesitados, pero no nos quedamos con solamente hacerle esa petición, sino que nos metemos la mano en el bolsillo, y sacamos unas monedas o billetes, y los introducimos en la Alcancía Tzedaká que siempre está en nuestra mesa, cuando se llena la alcancía le regalamos su contenido a alguien que esté necesitado.
“No endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano a tu hermano pobre” (Devarim / Deut. 15:7)

Alcancía tzedaká plastica colores niños
11 ctms
$ 19.000= Pesos colombianos

Alcancía Tzedaká metálica
Plateada
16 x 11 ctms.
$ 59.000= Pesos colombianos
Alcancía tzedaká
Madera y acrilico
17 x 6 ctms.
$ 59.000= Pesos colombianos


